Zada, la afgana que se ocupaba mucho hacia adentro.

Echo mucho de menos escribir. Hace tiempo una profesora de lengua me dijo que hacía buenos comentarios de texto, y ese comentario suyo me ayudó a tomar la decisión de estudiar Periodismo. Al cabo de muy poco me di cuenta de que no era lo mío.

Desde entonces he escrito diarios, en cuadernos bonitos y en agendas anuales feas y pasadas de fecha que estaban vacías, sin usar. Lo cual conlleva bastante dificultad porque la fecha no concuerda, el jueves 26 de octubre de 2017 resulta ser un miércoles en el año anterior. Sí, sorprendente. Bueno el caso es que he desahogado mis enfados y mis tristezas y mis momentos estáticos en esas páginas. Sin filtros y con mucha más expresividad en la letra que con estas teclas planas.

Y ahora de nuevo vuelvo a intentar escribir más en este medio. Algo así como un sueño que siempre tengo y nunca cumplo: «María podrías escribir un postitito cada semana»- dice mi voz exigente. Y mi yo vaga se niega a abrir la página de edición y sigue mirando pasivamente noticias, fotos, videos o lo que sea que encuentre en mi mini pantalla.

Lo primero es activo, y lo segundo pasivo.

Actividad y pasividad.

Estas ocupada hacia afuera o hacia adentro. 

Me doy cuenta de que existen dos tipos de actividades: algo que se hace hacia afuera, y algo que se hace hacia adentro.

  • Osease por ejemplo escribir, o bailar, o hablar, o cocinar; algo que va desde mí, hacia fuera, hacia un objetivo, hacia alguien son actividades hacia fuera.
  • Leer, ver una peli, o scrollear hacia abajo en la newsfeed o en las noticias es hacia dentro. También lo es pensar, imaginar, reflexionar y todas esas conversaciones que uno tiene consigo mismo continuamente sin que lleven a una acción concreta.

Y esto me lleva a pensar en Zada, una mujer afgana clienta en nuestro psiquiátrico y con la cual no me puedo comunicar ni una palabra. Su mayor problema es que básicamente está siempre ocupada hacia adentro.

Su vida transcurre de su frente hacia atrás, de su mirada hacia atrás, hacia sus pensamientos, hacia un continuo rumiar de pensamientos, miedos e imaginaciones fantasiosas negativas de qué podrá pasar, que habrán dicho y qué me está ocurriendo.

depression inwards

A veces, ansiedad o depresión, pueden ser sencillamente un exceso de ocuparse hacia el interior. No encontrar el equilibrio necesario entre un lado y el otro. O tener el área de visión girada.

A Zada, conjuntamente con la psicóloga le hemos recomendado que intente salir a caminar y nombre lo que ve a su alrededor. Que vuelva a ver el cielo, las tiendas, los árboles y de un descanso a su radio interna. Por ahora le va bien. Aunque hay mucho mucho por hacer.

 

Por eso a veces tenemos que saltar del sofá y ponernos a hacer algo pafuera,

y otras veces, cuando hacemos demasiado tenemos que parar el carro y mirar padentro.

 

Yo ahora ya he sacado un poquito de mí, ¿hay algo qué quieras sacar ahora tú?